Si me necesitas, silba. Como Rigodón con Willy Fog, como Kit con Michael Knight, Apurttu salió el sábado en auxilio del Amapola. Cuando los Reds se encuentran atascados tocan zafarrancho y el armero acude al rescate. Fiel a su cita, no defraudó ante el Edurtza.
Primero, para igualar en jugada personal el golazo inicial de un rival que demostró ser mejor de lo que su clasificación refleja. Después, para nivelar la contienda de doble penalti tras el contragolpe que dio lugar al 1-2. Y finalmente para echarse el equipo a las espaldas y sentenciar con tres goles más en la segunda parte.
Cinco chicharritos, nada menos, que añadir a su vasta colección particular. Tres puntitos de oro para el Amapola en su afán por pelear por la sexta plaza. Todo ello en un encuentro con dominio inicial del Edurtza y ocasiones en ambas porterías, varios palos incluidos, en el que el Amapola se la jugó al 'factor Apurttu'. Toma el balón y a ver qué puedes hacer, que fue mucho, pareció ser la táctica a seguir, que satisfizo plenamente al míster amapolino.
Todo ello en un encuentro en el que varios jugadores exhibieron una notable caraja acompañada de sequedad de garganta y ligero dolor de cabeza. El Pelirrojito los arrastró al lado oscuro de tan temprana franja horaria sabatina. Para muestra, el potente y ajustado disparo que Flórez, incomprensiblemente, ejecutó sobre la portería de Casillas y que rozó el gol. Vivir para ver. Beber para no ver.
Lo mejor Apurttu, un cuatro en el Marka.
Lo peor Lesión de Apurttu, en el mismo tobillo. A ver si es leve.
-----------------------------------------------
Un arranque igualado hacía presagiar un choque equilibrado y esa fue la tónica del partido hasta que Santi, superado ya el ecuador de la primera mitad, demostró que cuando va sobrio a los partidos siempre responde a su condición de 'Amapola Titán' y estableció el 0-1 en el marcador. Poco duró, sin embargo, la alegría en la casa rojilla, ya que el tesón del conjunto local se vio recompensado con el tanto del empate y, poco antes del descanso, una jugada desafortunada de Casillas propició el 2-1.
Lo mejor Päin Antona pudo asistir. Su recuperación va viento en popa.
Lo peor El Amapola quiso jugar con seis. Nos tendremos que aprender las normas un día de estos.
A los interesados, parece que hay que llevar camiseta azul.
Eduardo Päen Antona, veterano jugador-entrenador del Amapola, ha sido operado hoy satisfactoriamente de su maltrecho hombro, esa parte maldita que le ha apartado del fútbol sala en las últimas fechas.
Tampoco se afanó en exceso el Amapola en esta tarea en la reanudación, pero en la segunda parte sí que tuvo el acierto que le faltó en la primera, lo que le permitió coger una ventaja cómoda. Abrió la lata Apurttu, que aprovechó un despiste de la zaga y el portero local en una jugada ya finalizada. Gol de pícaro. Le siguió el de Flórez, de ajustado disparo a la base del poste. Falta por saber si fue queriendo o le salió así cuando se sacó el balón de encima porque no sabía qué hacer con él. 
El Atlético Santa María desaprovechó un penalti por deslizamiento, pero acortó distancias en un doble-penalti. A partir de ahí, el equipo de la Llanada intentó asediar el marco rojillo con portero-jugador, pero Kike puso la puntilla con un gran contragolpe que acabó en un golazo. Después, el de Yurre se llevaría todos los balonazos que el guardameta visitante envió desde fuera del área, frenando así las acometidas a la desesperada del Atlético Santa María.
