sábado, 27 de diciembre de 2008
Jamoncito entre uvas
martes, 23 de diciembre de 2008
FELIZ NAVIDAD
lunes, 22 de diciembre de 2008
Oriamendi 2-3 Amapola
La de veces que habremos escuchado a nuestras madres aquella sentencia tan manida de 'noches alegres, mañanas tristes'. Pues bien, amigos, era mentira. Seguramente nos lo decían con toda la buena fe del mundo, pero nos estaban engañando. El Amapola se ha encargado de desmontar el mito. Lo hizo con la ansiada segunda victoria de la temporada (¡Ya era hora, joder!!), que llegó justo al día siguiente de la cena de fin de año. Unas horas después, en realidad, de que varios componentes del equipo rojillo ejerciera de serenos (oficio, no estado) apagando el alumbrado de la ciudad con las primeras luces del alba.
Todo empezó en Zaramaga, habitual lugar de encuentro de las reuniones rojillas, donde se empezó a cocer la táctica con las primeras cañas de la tarde. Ya en el centro social, rodeados del mejor pulpo de Vitoria, costilla y lengua en salsa entre otras delicias culinarias, se gestó el triunfo que reengancha a los Reds a la lucha por la permanencia. Para cuando la garrafa de crema de orujo apuró las últimas gotas de tres litros del elixir amapolino ya nadie dudaba de que, si no la victoria, el espectáculo iba a estar asegurado al día siguiente en Agurain.
Ya lo estaba entonces, con las habituales 'Hristoapuestas' (menudo chollo se está perdiendo Bwin), un repaso al amplio anecdotario de Santutxu y los primeros cánticos de exaltación del amapolismo. Los bailes de Haginesku, con especial mención a "Me lleva él o me lo llevo yo pa'que se acabe la vaina", y la curiosa entrada del Pelirrojito al Txo terminaron de adornar una noche que para los más curtidos en estas lides se alargó hasta eso de las siete de la mañana.
Un sueñecito, unos tragos de agua y rumbo a la Llanada, en busca de lo que parecía una hazaña, ganar un partido. Esperaba el Oriamendi. Y también se hizo esperar el inicio real del partido, ya que los primeros quince minutos fueron de un insulso ritmo sin apenas ocasiones que evidenció que la noche había confundido a más de uno en ambos equipos.
Fue el equipo local el que, cerca del descanso, se decidió a desatar las hostilidades. Lo hizo con una fuerte presión en campo rojillo, pero el Amapola tiró de inesperada lucidez para sacar el balón y aprovechó una bonita ejecución de Juantelaar para irse al descanso con mínima ventaja en el marcador.
En la segunda parte se endureció el partido, bronco por momentos, y el dominio correspondió en mayor medida a los aguraindarras, que empataron mediado el período gracias a un potente disparo de fuera del área. No se arrugaron los de Zaramaga, sin embargo, que poco después volvieron a ponerse por delante por mediación del Niño de Yurre, el que más se guardó la noche anterior, que batió al portero local tras una jugada individual.
Quedaba aún mucha tela que cortar. Quedó claro cuando, a falta de unos cinco minutos para el final, el anfitrión volvió a nivelar la contienda. En ese escenario fue el Oriamendi el que se mostró más ambicioso (qué raro) y encerró al Amapola en su área, pero esa agresividad local se tradujo en una quinta falta a 1'30'' del final que a la postre resultaría decisiva. Porque con sólo 37 segundos por disputar llegaría la sexta y nuevamente el Niño de Yurre se encargaría de transformarla en gol de potente doble-penalti.
Tras medio minuto de angustia, con portero-jugador del equipo rival, los Reds se pudieron apuntar por fin la segunda victoria de la temporada, lo que permitirá pasar una Navidad tranquila en el Amapola, sin medidas drásticas que tomar por parte de la directiva.
Lo mejor La victoria no está mal, pero algunos bailes nocturnos no tienen precio.
Lo peor Más de uno ya tiene excusa para ponerse hasta las trancas en las vísperas de partido.
*En las fotos, Giovanni Dos Santos tras la cena de Navidad del Tottenham. Lo que no sabemos es si ganaron al día siguiente.
jueves, 18 de diciembre de 2008
Por si acaso...
domingo, 14 de diciembre de 2008
Amapola 1-4 Adana
miércoles, 10 de diciembre de 2008
martes, 9 de diciembre de 2008
Estadísticas
PICHICHI El Amapola es el único equipo del mundo donde un tío es máximo goleador con dos partidos.
1. Borja 5 (2,50)
2. Santi 5 (0,56)
3. Mikel 4 (0,44)
4. Kike 4 (0,40)
5. Pablo 2 (0,67)
6. Iñigo 2 (0,33)
7. Edu Flo 2 (0,22)
8. Juan 1 (0,13)
9. Hristo 1 (0,11)
10. Kapo 0
11. Edu Päin 0
Entre paréntesis, la media.
1. Casillas 14 (1,55)
3. Hristo 3 (3)
GUADAÑA Kike e Iñigo pugnan por conseguir el tercero y quedarse el trofeo en propiedad, pero el 'Niño de Yurre' es mucho líder. ¿Y Hristo? ¿YMikel?
1. Kike 4 (0.40)
2. Iñigo 3 (0,50)
3. Borja 1 (0,50)
4. Pablo 1 (0,33)
5. Edu Päin 1 (0,13)
6. Edu Flo 1 (0,11)
+. Hristo 1 (0,11)
+. Mikel 1 (0,11)
9. Kapo 0
10. Juan 0
11. Santi 0
1. Iñigo 75
2. Álvaro 64
3. Edu Päin 61
4. Hristo 52
+. Santi 52
6. Juan 49
7. Mikel 47
8. Edu Flo 46
9. Casillas 41
10. Kike 40
11. Pablo 26
12. Borja 24
13. Kapo 19
viernes, 5 de diciembre de 2008
miércoles, 3 de diciembre de 2008
martes, 2 de diciembre de 2008
Pese a todo, un poco más lejos
lunes, 1 de diciembre de 2008
Aretxabaleta 2-2 Amapola
Dos segundos. Ese es el tiempo que separó al Amapola de dar una campanada mayúscula ante el Aretxabaleta. El tiempo que reflejaba el electrónico de Judimendi cuando el líder de la categoría igualó la contienda ante un conjunto rojillo que dio una lección de casta y orden defensivo ante el mejor equipo de Liga de Honor. Un empate agridulce que sirvió para recordar al fútbol sala alavés que los Reds siguen vivos y para demostrarse a sí mismos que siguen siendo capaces de hacer cosas.
Cosas grandes, porque ese postrero tanto de la igualada no debe eclipsar lo que fue una extraordinaria labor de equipo, del primero al último. En la clasificación supone sólo un punto más, pero el valor anímico es incalculable. Era el partido que necesitaba el Amapola para volver a sentirse vivo en la competición.
Y no pudo elegir mejor día para hacerlo. Ante el todopoderoso Aretxabaleta, equipo más goleador y menos goleado, que sólo había cedido un empate en Liga, ante el Udapa. Allí se plantó el conjunto de Zaramaga para revivir grandes gestas como las que protagonizara el año pasado contra Calasanz o Aurrera. Mayor, si cabe. Mermado aún por bajas importantes como las de Borja, Pablo, Kapo o Iñigo, pero con unos cimientos tan sólidos como para levantar un muro contra el que se estrelló el líder. Evidenciando que, con rotación en el banquillo, este equipo puede plantar cara a cualquiera.
Así lo hizo desde el principio en Judimendi. Cedió balón y terreno al Aretxabaleta, que no encontraba vías fáciles de entrada hacia la portería de Alvarito. Sólo uno de los pocos errores rojillos propició el primer gol naranja. Apenas se habían cumplido tres minutos de juego, pero los colorados no se descompusieron en ningún momento. Siguieron a lo suyo, defensa ordenada y a esperar sus oportunidades. Y éstas llegaron. Päin Antona no pudo culminar la más clara en un bonito contragolpe, pero el Amapola ya había dejado claro que también podía hacer daño y a la siguiente no perdonó.
Un balón rechazado por Alvarito ejerciendo de 'libre' fue recogido por el inconmensurable Kike, que envió a Hristo para que éste dejara el gol en bandeja a Mikel Haginesku. Empate a uno, primeras dudas en el Aretxabaleta y rearme moral para el Amapola, que aguantó, sólido y ordenado, el marcador hasta el descanso.
Lo más complicado estaba hecho, pero la tarea que quedaba por delante no se antojaba sencilla. Aguantar la salida en tromba del líder era clave y los Reds cumplieron el cometido a la perfección. La segunda parte fue un monólogo naranja, pero la defensa y un gran Casillas se encargaron de dejar quieto el marcador.
Con varios minutos por disputar, el Aretxabaleta se la jugó con portero-jugador. Aumentó su dominio, pero también el riesgo. Y ahí apareció de nuevo Kike para elevar la temperatura del pabellón, con nutrida representación de afición rojilla en las gradas, con un gol imposible. El portero protegía el balón en un lateral de su portería, a la espera de que saliera, pero el Niño de Yurre tuvo los arrestos y la fuerza suficiente para superarle, robarle el esférico y enviarlo a la portería deslizándose sobre la línea de fondo, sin ángulo. Un tanto increíble que acercaba la sorpresa al marcador.
Los últimos minutos fueron un constante asedio a la portería rojilla, pero Casillas, excepcional, se multiplicó para abortar las oportunidades. El esfuerzo defensivo colectivo fue colosal. Un larguero y una clarísima ocasión fallada a un metro de la portería parecían hacer realidad lo que parecía un sueño. Pero éste se rompió en los últimos segundos. Quedaban siete cuando el Aretxabaleta sacó un córner. Balón atrás, para un uno contra uno que resultó definitivo. La pelota sacudió las redes con un tiro cruzado a falta de dos segundos.
Al final, sabor agridulce por el cómo, pero no por el qué. Poco tardaron los rojillos en quitarse esa pequeña decepción para pasar a la satisfacción por lo que habían conseguido. Un premio al esfuerzo supremo y a la labor de equipo. Un sobresaliente para todos.
Lo mejor El espíritu rojillo sigue vivo.
Lo peor La manera de llegar el empate.
jueves, 27 de noviembre de 2008
Prima navideña
Los rivales en cuestión son Aretxabaleta, Adana y Oriamendi. Ánimo y suerte. Vuestras hipotecas lo agradecerán.
PD: Cualquier parecido de la foto con la realidad es pura coincidencia.
miércoles, 26 de noviembre de 2008
G. Bush, socio de honor
martes, 25 de noviembre de 2008
Se fractura la clasificación...
lunes, 24 de noviembre de 2008
Amapola 1-3 Los Halcones
jueves, 20 de noviembre de 2008
Descojono
Pues sí, amiguetes, la gente se descojona, como no podía ser de otra manera. Seis de cada diez dentistas lo hacen. Más del 60% de los encuestados opinan que 'jajaja', mientras sólo unos pocos bebedores de tequila consideran que el ilustre delantero búlgaro saldra ileso de esta nueva aventura.
Briconsejo contra la crisis: el marisco está más barato antes de Navidad.
Y ahora nos ponemos serios para preguntar...
¿Se salvará el Amapola esta temporada?
martes, 18 de noviembre de 2008
Los rojillos no saben meterla
Lo dice la clasificación, el Amapola las pasa canutas para meter los fines de semana. Incluido Santutxu, el gigoló de Txagorritxu. El de Zaramaga es oficialmente el equipo menos goleador de la categoría, con 23 tantos en nueve partidos, cifras que arrojan un irrisorio promedio de 2,55 goles por cita. A cambio, sólo hay seis equipos que reciben menos, pero esta ecuación se antoja insuficiente. El resultado es que los Reds son penúltimos, una posición que podría ser peor, teniendo en cuenta que el farolillo, así como el predecesor en la tabla, tienen un partido menos. Negro panorama para un conjunto rojillo que tiene un ataque para ponerse colorado.
lunes, 17 de noviembre de 2008
Calasanz 5-1 Amapola
Los Reds, eso sí, dieron la cara en todo momento y sólo cedieron en los últimos minutos, cuando el desgaste resultó excesivo. Una defensa organizada les mantuvo en partido en todo momento y no renunciaron al ataque. Los locales llevaron el peso del encuentro, pero una buena contra culminada por Juan dejó el electrónico en un apretado 2-1 al descanso.
La segunda mitad comenzó por los mismos derroteros y ni siquiera el tercer gol granate descompuso al conjunto de Zaramaga, que envió dos balones al palo, uno en cada tiempo, y al que sólo desordenó el agotamiento final. Con la obligación de lanzarse al ataque en busca del empate, el Amapola optó por utilizar portero-jugador en los últimos minutos, pero esta suerte táctica necesita de frescura y precisión, virtudes que a esas alturas del encuentro habían desaparecido del libro de estilo rojillo.
jueves, 13 de noviembre de 2008
lunes, 10 de noviembre de 2008
Udapa 3-2 Amapola
El Amapola rozó la campanada ante el Udapa, uno de los 'gallitos' de la categoría. Mandó en el marcador durante buena parte del choque y aguantó bien las constantes acometidas locales, pero, dedicado casi exclusivamente a defender durante muchos minutos, terminó sucumbiendo al acoso del rival en el último tramo del partido. Los Reds, en definitiva, vendieron muy cara su piel. Derrota digna, pero derrota, al fin y al cabo, que deja a los de Zaramaga atascados en el fondo de la clasificación.
El mando del partido correspondió en todo momento al Udapa, que puso cerco al área rojilla desde el primer minuto, pero el Amapola, muy ordenado en defensa, le sorprendió en dos zarpazos en los primeros compases del partido. Santi culminó una buena jugada personal de Edu Flórez y Hristo hizo el segundo de potente disparo. Dominio local en la cancha, ventaja visitante en el electrónico.
El conjunto blanquillo, además, sólo generaba peligro real en jugadas a balón parado, principalmente desde el córner. Así acortaron distancias, en un lance desafortunada para los amapolinos, ya que Kike desvió un disparo despistando a Alvarito, al que el balón se le coló entre las piernas.
El partido siguió igual hasta el descanso y tras la reanudación, si bien el Udapa aumentó el ritmo en la segunda mitad y consiguió provocar cierto desorden en la zaga rojilla. Sus ocasiones crecieron en número respecto al primer tiempo y esa labor de desgaste terminó dando sus frutos superado ya el 'ecuador' del período. Un barullo a la altura del punto de penalti fue aprovechado por el pivote blanquillo para ejecutar el empate en un buen disparo a la media vuelta.
El gol descompuso a los Reds durante un tiempo, lo que aprovechó el Udapa para culminar la remontada a falta de tres minutos con un soberbio disparo que se coló por la escuadra de Casillas.
A partir de ahí, el Amapola lo intentó con portero-jugador y tuvo una buena ocasión en botas de Mikel, pero el balón no corrió con la suficiente fluidez como para generar mucho peligro sobre el arco rival. Un balón perdido motivó un tiro lejano que Iñigo desvió con la mano en un gesto instintivo. Segunda amarilla para redondear una matinal aciaga del cierre rojillo.
Con apenas quince segundos por disputar y en inferioridad numérica, el choque parecía finiquitado, pero incluso en esa tesitura tan adversa el Amapola sacó la casta suficiente para crear una gran oportunidad que Santutxu no acertó a materializar en un mano a mano con el portero. Al final, derrota con honores, pero derrota.
Lo mejor La respuesta de la afición un domingo por la mañana.
Lo peor Ya se sabe que el Amapola es de segundas vueltas, pero nos vamos quedando atrás.
jueves, 6 de noviembre de 2008
miércoles, 5 de noviembre de 2008
martes, 4 de noviembre de 2008
Justitos
domingo, 2 de noviembre de 2008
Amapola 2-2 La Parrilla
Intenso, equilibrado y con algún que otro rifi-rafe dialéctico que no pasó a mayores. El guión habitual de los duelos entre el Amapola y La Parrilla se volvió a respetar línea por línea el sábado en Mendizorroza. Al final, reparto de puntos que se puede considerar justo tras un partido de ida y vuelta en el que los Reds recuperaron el espíritu que parecía perdido en muchos momentos de un errático arranque de temporada. Con una defensa ordenada y un ataque productivo en ocasiones, sobre todo en la primera mitad, el conjunto rojillo ofreció una buena imagen para sumar un trabajado punto.
El choque comenzó con un dominio territorial de La Parrilla que no se tradujo en ocasiones claras. Sólo un penalti inexistente, de esos que extrañan hasta al conjunto beneficiado, permitió al conjunto de negro abrir el marcador. Que el árbitro llevara la misma camiseta (se cambió de color tras el descanso) fue sólo mera coincidencia. Pero el Amapola no se descompuso, siguió a lo suyo y comenzaron a llegar las ocasiones, desbaratadas en gran parte por la excelente actuación del guardameta rival. Y también por el larguero, que repelió una genial jugada de Haginesku, cañito incluido, que levantó el 'oohhh' de la grada.
Los rojillos merecían el empate y éste llegó en un perfecto contragolpe ideado por Iñigo, diseñado por Päin y culminado por Haginesku. Jugada de tiralíneas para hacer justicia en el marcador y dejar las espadas en todo lo alto para la segunda mitad.
Ésta comenzó con una subida de ritmo por parte del conjunto parrillero, que apretó en la presión y dificultó la salida de balón de un Amapola hasta el momento cómodo. La empanada de Santutxu en punta (casi es mejor que salga el día anterior) no hizo sino acrecentar los problemas ofensivos de los rojillos, que, en cualquier caso, mantuvieron su buen tono defensivo e intentaron aprovechar jugadas individuales en ataque.
Como la que hizo Kike para cocinar el segundo gol. Un potente disparo del 'Niño de Yurre' golpeó en la zona genital de un rival, allá donde no calienta el sol, y el propio jugador rojillo cogió el rechace para ceder el esférico a Flórez, que remachó a placer. Con cinco minutos por disputarse, el Amapola estuvo cerca de la victoria, ya que La Parrilla atacaba pero le costaba hacer peligro.
Hasta que una buena jugada personal de Totti sembró el caos en la defensa colorada, que se desordenó y permitió la igualada después de que un adversario libre de marca se aprovechara del rechace.
Los dos últimos minutos fueron de locura, de ida y vuelta y con ocasiones en ambas porterías. La más clara fue rojilla, para el Turu Flórez, que a escasos segundos para el final tuvo un mano a mano contra el portero que no acertó a resolver. A esas alturas de partido faltaba frescura y el electrónico se quedó como estaba, en tablas.
Lo mejor Frases célebres para la historia. "Sólo he venido al partido a cagar, ducharme y afeitarme", se escuchó en el vestuario rojillo.
Lo peor Actitudes del banquillo de La Parrilla, insultando a la grada. En el campo hablamos y protestamos todos, después nos damos la mano y ya está, pero increpar al público está feo.