Los Halcones 3-3 Amapola

Buen punto de partida

El Amapola sorprendió a propios y extraños, sobre todo a propios, en el estreno liguero. Después del calamitoso amistoso del jueves, la afición rojilla no las tenía todas consigo de cara al debut, pero el conjunto de Zaramaga plantó cara a Los Halcones en un buen encuentro y sumó su primer punto de la temporada. Lo hizo desde el rigor defensivo que le caracteriza cuando está metido en los partidos, pero sin renunciar a la parcela ofensiva. Los minutos finales fueron de asedio pajarero, con los Reds fundidos debido al esfuerzo, pero el empate se puede considerar justo.

Los rojillos estuvieron bien plantados desde el inicio, frenando las acometidas del rival, un buen equipo con individualidades desequilibrantes. Además, supieron tener paciencia con el balón y moverse en ataque, circunstancia poco habitual, para abrir huecos y generar oportunidades. Las hubo en ambas porterías, pero el primer gol del choque llegó cuando el halcón Fifi aprovechó un error amapolino con el esférico para plantarse delante de Alvarito y definir con clase.

El Amapola, pese al tanto en contra, no se descompuso. Siguió jugando igual, bastante bien, e igualó la contienda gracias a un certero punterazo de Iñigo desde lejos. Hubo más oportunidades y Alvarito desbarató alguna buena llegada del adversario, pero el duelo llegó al descanso con empate a uno.

El escenario no cambio en la reanudación y los de Zaramaga no perdieron la cara al choque en ningún momento. Igual, con orden atrás y criterio arriba. Así llegó el 1-2, del debutante Alex, que hizo buena la asistencia de Iñigo desde la posición de cierre para fusilar al portero. No duró mucho la alegría rojilla, puesto que un nuevo error en la posesión dio origen a otro contragolpe que igualó de nuevo la contienda.

Pero si hay que hablar de contragolpes hay que hacerlo del que dio origen al 2-3, culminado por Pablo Zizou tras nueva asistencia de Iñigo en un mortal tres para dos. Fue a partir de ahí cuando empezó a flojear el Amapola. En la parcela física, básicamente. La intensidad del encuentro pasó factura al poco rodado equipo rojillo, que, fruto del cansancio, dio un paso atrás para encerrarse en su área, de la que ya no saldría en los últimos cinco minutos.

El empate llegó en otro error rojillo. Los Halcones se mostraron como auténticos depredadores, un equipo al que no se le puede conceder el más mínimo regalo, ya que tienen calidad de sobra para no desaprovecharlos. El último tramo del partido fue suyo y se hizo eterno para el Amapola, aunque el conjunto de Zaramaga aguantó estoicamente. La última ocasión, de hecho, fue suya. En pleno acoso pajarero, Päin robó un balón suelto en campo propio y, con dos segundos por disputar, lo lanzó por encima del adelantado portero, pero el tiro salió desviado. Al final, justo reparto de puntos en un buen encuentro de los Reds.